jueves, 7 de enero de 2016

You think I'm crying on my own, well, I ain't.

"Ninguna te follará como yo te escribía."

A ver ahora quién te va a decir que tienes los mofletes más gorditos del mundo,
que no sea yo,
y después te acaricie los hombros.
No hace falta sacarse el doctorado
ni estudiarse a Kant en su totalidad,
nadie va a tener los cojones de perder la cabeza por ti.
 
Y qué triste,
y que te ilusionen con la conjugación de causa perdida,
y que te jodan hasta que quieras apretar el gatillo y volarte la puta cabeza.
Lo único que te mereces es que te dejen a un punto y coma del mejor polvo de tu vida;
y a mí ya no me importa(s).
 
Y ojalá te pongas a pensar a quién estaré dedicando mi tiempo y mis letras,
porque esto para ti es el punto final,
a mí ya no me dueles.
 
Que te escuezan los labios imaginando que yo he besado otros,
porque sí,
porque un poeta me está curando el corazón.
Y tiene mejores besos,
y principios.
 
Y le importa si lluevo, porque no quiere.
 
Y me insulta de la forma más bonita que jamás he conocido,
y sí,
sus labios son finos,
pero qué labios.
 
Que te follen,
que te follen y te caiga una montaña en el vientre porque no son mis piernas las que besas.
 
Y porque a mí me las van a besar,
y no vas a ser tú.
 
Qué bonito ha sido echarte de mi vida y de mis heridas.
 
Tu inicial la ha completado un precioso nombre,
e increíble hombre.
 
Y me gusta más cuando el mío sale de su boca.

domingo, 3 de enero de 2016

Autoterrorismo y otros fracasos.

Hoy no quiero no tenerme en cuenta.
 
De vez en cuando los ojos se me llenan de imposibles,
el vientre de puntos de sutura
y el corazón se me satura a base de él.
 
Es entonces cuando me noto el grito,
lo ahogo,
e intento no romper a llover.
A mí mi puta saliva no me cura y aun así escuece de maravilla,
no se lo contéis,
para él yo sé cuidarme solita.
 
Me he convertido en mentira,
y siempre me empeño en decirle que estoy bien;
pero ojalá estuviesen aquí sus besos haciéndome dormir.
 
Las promesas me las rompo yo
creyendo
(como si fuese estúpida)
que esta noche no voy a volver a susurrarle.
 
Últimamente llamo dormir a dolerme
creyendo
un nosotros en demasiados lugares.
 
Y ojalá.